Cuando la policía en Christchurch (Nueva Zelanda) recuperó un coche abandonado durante una persecución encontraron a un cachorro escondido debajo de los asientos. Los dos agentes que rescataron al cachorro se enamoraron de él y ahora tiene un nuevo hogar con uno de los policías.
El 24 de agosto la policía perseguía a un coche después de que el conductor no se detuviera cuando un agente le dio el alto. Después de una persecución los agentes encontraron el coche abandonado. Cuando hicieron el registro del vehículo la sorpresa fue gigante al encontrarse a un cachorro de seis semanas de edad, encogido debajo de uno de los asientos traseros del coche.
Estuvieron esperando durante una semana a que alguien reclamara el cachorro y como nadie lo hizo finalmente fue adoptado por uno de los policías.
quien lo iba a reclamar nadie solo un gafo, porque otro no si lo iban a buscar preso quedaban por no detenerse cuando le dieron la voz de alto, lo que tiene es que hacerle una placa al pobre animal
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